El cliente actual quiere servicios personalizados que cubran sus necesidades específicas
La personalización de los servicios ha ido cogiendo fuerza en los últimos años. Los consumidores ya no se conforman con productos que cubran sus necesidades sino que buscan productos hechos a su medida.
El sector de los seguros ha sido uno de los más afectados en cuanto a la personalización. Cada vez son más los clientes que buscan un seguro que cubra sus necesidades específicas. El viejo modelo de negocio donde el cliente aceptaba los modelos predeterminados de seguros ya no tiene cabida y menos desde la llegada de las insurtech que explotan la experiencia de usuario.
Las nuevas tecnologías, Big Data e Internet de las Cosas, han permitido a los seguros crear servicios a la medida de los consumidores. Seguros para eventos, bodas, viajes, mascotas, móviles y drones son alguno de los servicios que han ido surgiendo al margen de los gustos y preferencia de los clientes.
Por otro lado, cada vez son más populares los seguros por uso. Estos seguros o micropólizas están pensados como una solución para poder ofrecer primas más justas. Así por ejemplo, en el sector automovilístico, diferentes empresas como Mapfre o Zurich, ofrecen seguros que varían en precio según el número de kilómetros que realiza el conductor, las vías por las que suele conducir o el momento del día donde más utiliza el coche.
La personalización de los servicios no termina con productos hechos a la media. Otra de las innovaciones que más se ha popularizado es la posibilidad de reducir el coste de la prima al lograr diferentes objetivos. Un ejemplo de esto lo encontramos dentro de los seguros de salud, donde se le da la posibilidad al cliente de reducir el coste de su prima si se ejercita más o lleva un estilo de vida más saludable. El consumidor tiene la oportunidad de ir ajustando el precio de su póliza a medida que alcanza superar ciertos obstáculos. De esta manera, hay una mayor interacción entre el seguro y el asegurado.
Los servicios a medida son cada vez más populares. Las insurtech han sacado mayor provecho de esto para conectar con particulares y pequeños negocios que no consideran necesaria una cobertura completa. Sin embargo, las compañías tradicionales también están buscando ofrecer servicios personalizados a sus clientes y darle un valor añadido a su oferta que no mantenga una relación con el precio.
Es una realidad, todos los clientes queremos ser tratados de manera personalizada. Además de la adaptación de la prima según el uso y riesgo asegurado, el mundo asegurador está avanzando claramente en la identificación de nuevas necesidades, como el seguro por días o carsharing que AXA ha lanzado con Bla Bla Car